La Asamblea Nacional Catalana ve una maquinación del gobierno español detrás de la huelga del Prat. Jordi Sànchez, su presidente, lo ha afirmado en Al Rojo Vivo, afirmando que ve "probable" esta teoría ante la inacción del Gobierno.

Por eso justifica el reparto de propaganda y el mensaje de que en una Cataluña independiente todo sería distinto: "No es si habrá o no huelgas, sino qué actitud tendrá la empresa responsable de un servicio público".

El Govern no llega al punto de la teoría conspirativa, pero casi. El consejero de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat de Catalunya, Josep Rull, explica que "hace 15 o 16 días ya se avisó al Gobierno de que podía haber una huelga.

Mientras, continúan las colas en el Prat pese a la jornada sin paros, y muchos viajeros han vuelto a llegar con horas de antelación ante posibles imprevistos.

Fomento pide en un comunicado a Eulén que haga un esfuerzo por llegar a un acuerdo y se han vuelto a reunir las partes para desencallar el conflicto. Sin embargo, el asesor del comité de huelga Juan Carlos Giménez afirma que se está "a medio camino" y "todavía falta mucho".

AENA ha confirmado que adjudicó la concesión de la seguridad del Prat a Eulén por ser la oferta más económica, pero una diferencia de un 2% no justifica el empeoramiento de las condiciones laborales de los trabajadores.

Los paros podrían extenderse a otros servicios. Los trabajadores de la empresa Ilunion, encargada de vigilar las instalaciones y el escáner de la facturación de maletas, ya han anunciado un paro indefinido a partir del 16 de agosto.