El consejo de administración de Banco Sabadell ha acordado en sesión extraordinaria trasladar su sede social a Alicante ante la posibilidad de que en los próximos días el Parlament de Cataluña haga una declaración unilateral de independencia.

Este cambio de domicilio social garantizará que la entidad siga estando bajo el paraguas regulatorio del Banco Central Europeo (BCE) en caso de secesión, lo que garantiza los intereses de accionistas, clientes y empleados dentro de cualquier escenario.

Este traslado supondrá también que el pago de impuestos de la sociedad se lleve a cabo en la ciudad que albergue la nueva sede del banco, en este caso Alicante.