"Voy a ir a verlos personalmente y voy a escoger el adecuado", así ha anunciado Donald Trump que él mismo será quien elija el 'mejor' prototipo de muro con México.

Sin fecha para esa visita, lo que sí es oficial es que será la agencia que controla las fronteras la que compruebe que estos muros cumplen su función. Explican que "las características buscadas es que no se puedan escalar, que no se puedan escarbar, que no se puedan penetrar y que sean seguros para los agentes".

Trump prefiere un muro en el que puede verse lo que hay al otro lado. Tiene una teoría sobre quienes trafican con droga desde México hacia Estados Unidos. "Cogen las drogas y, literalmente, las lanzan. 50 kilos de droga. Las lanzan por encima del muro, tienen catapultas, las lanzan por encima del muro y le caen a alguien en la cabeza", afirma.

No obstante, los expertos dicen que un muro no es la solución y avisan de que lo único que han conseguido los muros es volver más peligroso el cruce.

Sólo entre 2000 y 2016 se han documentado más de 6.000 muertes en la frontera sur de Estados Unidos. Eso, que se sepa porque son muchos los que desparecen en ese viaje y de los que nunca más se vuelve a saber.