En medio de un foro público y aguantándose la risa, así puso
en evidencia Vladimir Putin a su ministro de Agricultura ruso tras sugerir
aumentar las exportaciones de cerdo rusas "a países como China, Indonesia o Japón".
Una afirmación que el presidente ruso no tardó en corregir: "En Indonesia no
comen cerdo".
"De acuerdo, Corea del Sur entonces", respondió Tkacev para
salir al paso del comprometido momento. En ese momento el presidente no pudo
aguantar el ataque de risa por el error y se tapó la cara para no mostrar las
carcajadas.
Lo cierto es que en Indonesia el 86,1% de la población, unos
220 millones de personas, es musulmana.