El Congreso de Perú aprobó un proyecto de ley que autoriza en el país "el uso medicinal y terapéutico del cannabis (marihuana) y sus derivados". La propuesta recibió 67 votos a favor, 5 en contra y 3 abstenciones del pleno legislativo, por lo que quedó lista para su promulgación por el Ejecutivo.

La ley legaliza el uso medicinal de la marihuana y de sus derivados, como el aceite de cannabis, para aliviar los síntomas de enfermedades como el cáncer, la epilepsia y el parkinson.

El legislador oficialista Alberto de Belaunde, quien fue el promotor de la propuesta, informó que, una vez promulgada la ley, el Gobierno tendrá 60 días para elaborar su reglamento. Agregó que este documento deberá ser publicado previamente para que todos los ciudadanos tengan acceso a su contenido y, en caso de considerarlo, envíen sugerencias y propuestas.

"Lo logramos. Momento histórico para el Congreso y el país: Cannabis medicinal legal", agregó De Belaunde en un mensaje en Twitter. La propuesta fue sustentada hoy por el congresista Ricardo Narváez, presidente de la Comisión de Salud del Congreso, que la semana pasada ya había aprobado el dictamen.

"Para nosotros es una gran satisfacción; es una ley que va a revolucionar, en un país con muchos prejuicios, temores y miedos, creo que es un buen mensaje", declaró Narváez al canal N de televisión.

Agregó que se autorizó la importación, producción e investigación en el país sobre el uso medicinal de la marihuana y que, para el tema de la producción, que consideró "el más polémico", el Ejecutivo tendrá que establecer el reglamento.

El parlamentario Javier Velásquez, presidente de la Comisión de Defensa, que en septiembre pasado también aprobó el proyecto, informó, por su parte, que, en una primera etapa, el cultivo y la producción de la marihuana deberá ser autorizado por instituciones del Estado como el Instituto Nacional de Salud.

La norma nació de una propuesta del Gobierno, que se comprometió a elaborar un proyecto para despenalizar el uso medicinal de la marihuana después de que se desatara una polémica cuando la Policía Nacional allanó en febrero pasado un laboratorio clandestino donde se fabricaba aceite de marihuana para niños enfermos.