La Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos ha denunciado que una veintena de civiles han sido ejecutados en Egipto en siete días por órdenes de tribunales militares, sin que se haya respetado el derecho al debido proceso, a pesar de que en los casos de pena de muerte debe cumplirse con especial apego.

La portavoz de la ONU Liz Throssell ha indicado que, según la información que maneja el Alto Comisionado, cinco hombres fueron ahorcados el 2 de enero por destrucción de la propiedad pública y el 26 de diciembre otros 15 fueron ejecutados por cargos de terrorismo.

"Estamos profundamente preocupados", ha dicho Throssell en declaraciones a la prensa desde Ginebra. "Los civiles solo deben ser juzgados en tribunales especiales o militares en casos excepcionales" y asegurando que se cumplen todas las garantías procesales recogidas por el Pacto de Derechos Civiles y Políticos, del que Egipto es parte, ha recordado.

"Creemos que en estos casos el derecho al debido proceso no se ha seguido, ya que los tribunales militares suelen negar los derechos reconocidos en los tribunales civiles" y eso a pesar de que "en los casos de pena de muerte se deben cumplir los máximos estándares de Justicia", ha incidido.