Tras cerca de 24 horas reunidos en la sede de la Unión Cristianodemócrata en Berlín, fuentes de los equipos negociadores señalaron que se han superado las principales discrepancias y se ha acordado el reparto de los ministerios, aunque falta cerrar definitivamente algún punto.

Los socialdemócratas asumirán previsiblemente, entre otros departamentos, los ministerios de Asuntos Exteriores, Finanzas y Trabajo.

El acuerdo puede acabar con un largo período de incertidumbre política en Alemania, después de que en noviembre fracasara el primer intento de Merkel, una alianza con liberales y verdes.

Pero este pacto todavía debe ser refrendado en una consulta vinculante a la que están llamados los cerca de 464.000 militantes socialdemócratas, más 24.000 de ellos afiliados desde principios de año.

Está por ver cuántos de ellos han atendido la llamada de las juventudes socialistas, que pidieron nuevas afiliados para votar "no" a la gran coalición con Merkel.