Un terremoto de 6,1 grados de magnitud sacudió el oeste de Japón y causó la muerte de al menos tres personas, incluida una niña de nueve años, y decenas de heridos, según informó el Gobierno.

El portavoz del Ejecutivo nipón, Yoshihide Suga, informó en rueda de prensa de que al menos tres personas han fallecido como consecuencia del seísmo, mientras que la cadena pública NHK habla de al menos 61 heridos, una treintena de ellos en la ciudad de Osaka.

Los tres muertos confirmados son una niña de nueve años que falleció debido al derrumbamiento de un muro en un colegio en la localidad de Takatsuki (prefectura de Osaka), un hombre de 85 al que se le cayó encima una estantería en su casa de Ibaraki (en la misma prefectura) y otro varón de 80 que quedó sepultado bajo otra pared desplomada en la ciudad de Osaka.

El seísmo tuvo su hipocentro a 13 kilómetros de profundidad en la prefectura de Osaka, en la isla de Honshu, la mayor del archipiélago nipón, y a unos 500 kilómetros al oeste de Tokio, informó la Agencia Meteorológica (JMA).

El seísmo, por el que no se activó la alerta de tsunami, alcanzó el nivel seis bajo en la escala japonesa cerrada de siete grados (centrada en el grado de agitación en la superficie) en la prefectura de Osaka y de cinco alto en la vecina prefectura de Kioto.

La JMA cifró en un primer momento la intensidad del terremoto en 5,9 grados y su hipocentro en 10 kilómetros pero actualizó los datos horas después.

Varios edificios en las ciudades de Osaka y Takatsuki se han derrumbado e incendiado, según las imágenes emitidas por NHK, que ha informado de que podría haber personas atrapadas.

El temblor ha causado la suspensión del servicio de tren bala en la zona, lo mismo que ha ocurrido con los servicios ferroviarios locales en las prefecturas de Osaka, Shiga, Hyogo, Kioto y Nara, mientras que el suministro eléctrico ya se ha recuperado en la región en la que quedaron afectadas unas 170.000 viviendas.

El aeropuerto Internacional de Kansai (Osaka), el más importante del oeste de Japón, ha sido reabierto después de que se confirmara el buen estado de sus pistas, mientras que en el segundo aeropuerto de esta ciudad se habrían cancelado 41 vuelos.

Por su parte, las autoridades informaron de que ninguno de los 15 reactores nucleares con los que cuenta esta región se han visto afectados por el temblor.