La pacífica 'Marcha por la Justicia' del líder opositor turco Kemal Kiliçdaroglu, iniciada en un parque de Ankara tras el encarcelamiento de uno de sus diputados, concluyó con un mitin en Estambul al que asisten cientos de miles de personas.

Que nadie piense que la marcha termina aquí. Este es el primer paso. El 9 de julio es un nuevo inicio, un nuevo nacimiento", declaró en el acto Kiliçdaroglu, jefe del Partido Republicano del Pueblo (CHP), la mayor formación opositora, socialdemócrata y laica.

"Vivimos un tiempo de dictadura", advirtió el político al referirse al régimen del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, y su islamista Partido Justicia y Desarrollo (AKP), en el poder desde 2002.

Exigió, entre otros puntos, levantar el estado de emergencia impuesto tras el fallido golpe militar de hace un año, liberar a los periodistas encarcelados, garantizar la libertad de prensa y de expresión y fortalecer el parlamentarismo y la educación secular.

Se manifestó en contra de la purga generalizada contra los seguidores del predicador islamista Fethullah Gülen, a quien Ankara acusa de haber urdido la intentona golpista, y a favor de un esclarecimiento "real" de los hechos.

El líder opositor, de 69 años, caminó solo los últimos 1.000 metros del trayecto de 450 kilómetros iniciado el 15 de junio, hasta llegar al lugar de la concentración, un parque del barrio de Maltepe, en el lado asiático de la ciudad del Bósforo.

Allí se encontró con las decenas de miles de personas que lo acompañaron estos días durante la caminata y muchas más que acudieran al mitin.