A los ejecutivos de Google, Amazon y Starbucks, les han sacado los colores en el Parlamento Británico por no pagar el impuesto de sociedades.

El próximo lunes, los legisladores del Reino Unido interrogarán a ejecutivos de Starbucks, Google y Amazon para saber cómo se las han arreglado para pagar solamente pequeñas cantidades de impuestos en este país, en momentos en que acumulan miles de millones de dólares en ventas en el país.

El Comité de Cuentas Públicas (PAC), que se encarga de supervisar los asuntos financieros del Gobierno, ha invitado a las compañías a entregar evidencias en medio de una creciente preocupación pública y política sobre evasión de impuestos por parte de grandes empresas internacionales.

"Es difícil para una persona normal creer que esto es justo", ha asegurado Margaret Hodge, miembro del Parlamento del partido laborista de oposición y presidenta del PAC. "Hace que la gente se enfade en el actual clima fiscal", ha agregado, en referencia a las medidas de austeridad con grandes déficits presupuestarios a los que se ha visto obligado a tomar Reino Unido y otros países.

Reino Unido y Alemania han anunciaron la semana pasada planes para impulsar al G-20, el grupo compuesto por las 20 potencias económicas mundiales, a hacer que las multinacionales paguen una "parte justa" de impuestos tras las informaciones sobre grandes firmas que explotan lagunas legales para evitar impuestos.

La mayor cadena de cafés del mundo ha pagado sólo 8,6 millones de libras (unos 10,7 millones de euros) en impuestos en Reino Unido durante 13 años en los que registró unas ventas de 3.100 millones de libras.

Sin embargo, Starbucks ha segurado que sigue las normas sobre impuestos en cada país donde opera y trata de pagar su parte justa de impuestos. "Estamos comprometidos a ser transparentes en esta cuestión y esperamos comparecer ante ese comité", dijo una portavoz.

El presidente financiero de Starbucks, Troy Alstead, comparecerá ante el comité, así como Matt Brittin, presidente ejecutivo de Google en Reino Unido, y Andrew Cecil, Director de Políticas Públicas de Amazon con sede en Bruselas, dijo una portavoz de PAC.

Documentos legales de Google muestran que obtuvo 4.000 millones de dólares (3.144, millones de euros) en ventas el año pasado en Reino Unido, pero a pesar de tener un margen de beneficios del 33 por ciento, su principal unidad en Reino Unido tuvo una carga por impuestos de sólo 3,4 millones de libras (4,24 millones de euros) en 2011.

La compañía evita pagar impuestos en Reino Unido canalizando las ventas a través de su unidad irlandesa, un arreglo que le permitía pagar una tasa de impuestos del 3,2 por ciento sobre las ganancias fuera de Estados Unidos.

La principal unidad de Amazon en Reino Unido pagó menos de un millón de libras en impuestos sobre la renta el año pasado. La compañía tuvo unas ventas en suelo británico de entre 5.300 y 7.200 millones de dólares (entre 4.167 y 5.660 millones de euros), según documentos legales.

Amazon evita los impuestos británicos informando de sus ventas europeas a través de una unidad con sede en Luxemburgo. Esta estructura le permitió pagar una tasa de impuestos del 11 por ciento sobre beneficios extranjeros el año pasado, menos de la mitad de la media del impuesto sobre la renta en sus principales mercados.

Un reportaje de la Sexta Columna en enero del 2012 ya advrtió sobre esto. Las grandes empresas, también muchas españolas, se llevan el dinero a Irlanda, Holanda o Luxemburgo con una serie de trucos para pagar lo más mínimo. Es lo que se conoce como el "Sandwich holandés". Una empresa opera en España pero depende de otra con sede en Holanda, y este país tiene línea directa con el paraíso.

Aunque en el Reino Unido, por lo menos ya están dando explicaciones sobre la evasiónde impuestos, algo que todavía no se ha visto en España.