El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, prometió "arrancar la cabeza" a los instigadores del fallido golpe militar en la conmemoración del primer aniversario y que el gobierno atribuye a la cofradía del predicador exiliado Fethullah Gülen.

Erdogan enumeró en su discurso ante una multitud en Estambul tanto a la "Organización Terrorista Fethullah Gülen" como al proscrito Partido de Trabajadores de Kurdistán, la guerrilla kurda, y al Estado Islámico, asegurando que hacían causa común.

"Sabemos quién está detrás de FETÖ, PKK y Daesh. Lo primero que haremos es arrancar la cabeza a esos traidores", tronó el presidente durante la ceremonia celebrada en un extremo del puente del Bósforo y transmitida en directo por la cadena NTV.

También reiteró su ya conocida postura a favor de la pena de muerte, abolida en Turquía en 2004, y aseguró que firmaría una enmienda constitucional para reintroducirla si el Parlamento la votara.

El actual reparto de escaños en el hemiciclo, con dos partidos opositores firmemente opuestos a la pena capital, no permite aprobar la enmienda sin un referéndum, y además sería imposible aplicarla del forma retroactiva a los golpistas.