Hillary Clinton ha sido la primera en depositar su voto sonriente y acompañada de su marido, incluso ovacionada dentro del centro de votación. No han faltado las fotos y el mensaje: "Sé cuánta responsabilidad va en ello y la gente que está pendiente del resultado de estas elecciones, lo que significa para este para este país, y lo haré lo mejor que pueda si soy la afortunada de ganar".
Es la hora del voto, de decidir entre Trump o Clinton, tres horas después de ella, era el turno de Donald Trump, recibido con algún abucheo y también acompañado de su mujer y de su hija. Ha hecho un alto con unos niños que vendían galletas en el centro de votación y se ha mostrado optimista: "Queremos ganar, vamos a hacer por ganar".
También se ha dejado ver
Obama, que ha cumplido con un ritual: jugar al baloncesto en la jornada
electoral. Poco después ya de traje y en la Casa Blanca lanzaba su mensaje: "Vota,
depende de ti".
El propio Trump, que
llamaba a estar vigilantes en la jornada de hoy frente a posibles fraudes electorales,
ha visto como poco antes de ir a su centro de votación aparecían dos activistas
de Femen que han irrumpido con el torso desnudo. Han sido retenidas por la Policía.
También ha votado el que
será vicepresidente de Clinton si ésta gana, lo ha hecho a primerísima hora y ha
llamado a hacer lo mismo: votar. Ha hecho lo propio su homólogo republicano Pence,
pero algo más tarde porque previamente ha hecho algo de deporte.
Hoy se arañaran votos
hasta el último minuto, un trabajo del que se encargarán los voluntarios de
ambos candidatos. "Hay un
acto a las cinco donde nos vamos a juntar todos en el campus para intentar animar a
los que estén más rezagados a que vayan a votar", explica
David Molinero, voluntario demócrata.
Ellos también vigilarán
que en los centros nadie vista llevando algo pida el voto por alguno de los
candidatos. En las filas demócratas han promovido a ir a votar de blanco. El
que Clinton ha hecho suyo durante la campaña. Incluso una anciana de 102 años
cumple con ir de blanco y de traje que recuerda a la candidata por la que vota
y la que espera, sea su primera presidenta.