Los diputados del movimiento Vetevendosje (Autodeterminación) arrojaron el gas en cuatro intentos de reanudar la celebración la sesión para realizar la votación.

El gas fue introducido en el Parlamento a pesar de que durante el día se reforzaron los controles policiales de los diputados y del edificio.

La oposición kosovar recurrió ya en los años 2015 y 2016 al lanzamiento de gas lacrimógeno como método de protesta contra el acuerdo de demarcación fronteriza con Montenegro, firmado en 2015. Los nacionalistas kosovares se oponen al acuerdo por considerar que cede más de 8.000 hectáreas al país vecino.

La votación se esperaba hoy después de un debate iniciado ayer y que se prolongó durante ocho horas, después de meses de intentos, bajo presiones internacionales, de la coalición en el poder de sumar dos tercios de apoyos necesarios para la ratificación.

La ratificación del acuerdo fronterizo con Montenegro es una condición exigida por la Unión Europea (UE) para liberalizar el régimen de visados para Kosovo, además de progresos en la lucha contra la corrupción y el crimen organizado. La oposición a la demarcación con Montenegro llevó el año pasado a elecciones anticipadas y a un cambio del Gobierno.

La antigua provincia serbia de Kosovo, poblada por una gran mayoría de albaneses, proclamó en 2008 de forma unilateral su independencia.