Combatientes voluntarios internacionales pelean con kurdos contra Daesh en el norte de Siria y han proclamado la primera unidad militar LGTB: la 'Armada Marica de Liberación e Insurreción', o 'TQILA', por sus iniciales en inglés. Un movimiento anarquista, las Fuerzas Guerrilleras del Pueblo de la Revolución Internacional, fue el encargado de anunciar su creación.

Este grupo forma parte de un batallón que reúne luchadores extranjeros que han viajado al norte de Siria para combatir a Daesh junto a la milicia kurda conocida como YPG. Se formó en abril, solo dos meses después de una ofensiva apoyada por Estados Unidos. En Twitter han colgado una declaración que decía que "los miembros buscan asentar el género binario y el avance de la revolución de la mujer, así como la revolución sexual".

El grupo oculta cuánta gente conforma el grupo así como quienes forman parte de las unidades y cuantos miembros de la comunidad LGTB hay. Según explican, se formó porque sus miembros han visto "con horror como el fascismo y las fuerzas extremistas de todo el mundo han atacado a la comunidad homosexual y asesinado a incontables miembros de la comunidad aludiendo que estaban enfermos y era innatural".

Desde que Daesh se asentó en países como Siria e Irak, implantó su propaganda con imágenes y montajes que mostraban a homosexuales con los ojos tapados y lanzándolos desde edificios frente a la masa. En el caso de que sobrevivieran, el mismo público les lanzaba piedras.

El grupo yihadista capturaba a una persona sospechosa de ser homosexual, espiaban sus contactos y seguían el rastro de otra gente que creían que fuera gay. En estos tres últimos años, docenas de personas LGTB han sido asesinadas bajo las reglas de Daesh.

Los componentes de 'TQILA' también acusan a los conservadores cristianos de atacar a la comunidad LTGB. Justo lo contrario de lo que ocurre en las milicias kurdas, que tratan por igual a hombres y a mujeres, algo inédito en otras organizaciones militares: tienen incluso unidades íntegramente de mujeres.