Los resultados negativos de Apple no concuerdan con sus excelentes ventas en el mercado español. El gigante tecnológico utiliza una estrategia en su facturación para evitar pagar apenas impuestos.

“Es una cuestión de márgenes: ¿dónde tributan menos? En Irlanda, pues allá van”, explica Gonzalo Boronal, profesor de la Universidad Europea de Valencia.

Apple registró el año pasado un récord de ventas de 2031 millones de euros. Pero como si fuera un vendedor ambulante, la compañía afirma que de ese dinero, solo se queda un 1% de comisión, el resto se va a Apple Irlanda, donde se pagan menos impuestos. Así que en España declara solo 20 millones de euros.

Con esta fórmula, Apple no sólo evita pagar apenas impuestos en España sino que además, se las ingenia para que Hacienda le devuelva 4 millones de euros al final del ejercicio.

“Nosotros planteamos que el Ministerio de Hacienda haga pública una lista con lo que este tipo de empresas tributan en España”, opina Carlos Cruzado, presidente de Gestha.

No es la única multinacional que esquiva pagar impuestos a través de este dudoso sistema de facturación. Francia le reclama a Google hasta 1000 millones de euros en impuestos.