"Mejorar nuestra posición de competitividad no es una opción, es una cuestión de supervivencia". Este ha sido el mensaje que ha trasladado el director general de Opel España, Antonio Cobo, en una carta a los trabajadores de la planta zaragozana de Figueruelas.

En esta misma misiva ha sido en la que esta semana ha anunciado a los empleados la paralización del plan del nuevo Corsa, entre otras medidas, ante la falta de acuerdo en la negociación del convenio colectivo, que tanto la empresa como los representantes de los trabajadores negocian desde octubre.

Esta semana, los sindicatos han manifestado que suspendían las negociaciones hasta que la empresa se sentase a hablar de los puntos que el conjunto del comité de empresa había tratado como prioritarios, entre ellos que la dirección presente un plan industrial para la factoría zaragozana.

Los trabajadores afectados por el convenio de Opel España, en su mayoría empleados en la planta zaragozana de Figueruelas, han recibido una carta personalizada firmada por Antonio Cobo. En ella, habla de la situación por la que atraviesa la firma Opel/Vauxhall, "que arrastra importantísimas pérdidas en los últimos años".

Además, reconoce que se ha fallado "a la hora de transmitir" esta situación a la plantilla y que tampoco se ha sabido explicar que los competidores de la factoría zaragozana ya no son las plantas alemanas o inglesas de Opel/Vauxhall sino las que van a fabricar vehículo de la planta Common Modular Platform (CMP) en el grupo PSA. "Son seis plantas situadas en Marruecos, Portugal, España (Madrid y Vigo), Francia y Eslovaquia".

La misiva señala que "todas menos una" tienen costes de manufacturas muy por debajo de los de la factoría zaragozana. "El grupo PSA va a tomar sus decisiones de inversión en función del coste de fabricación en cada planta. Mejorar nuestra posición de competitividad no es una opción, es una cuestión de supervivencia".

Antonio Cobo señala que, ante el bloqueo en la negociación, el grupo comunicó que Opel/Vauxhall sólo invertirá en proyectos que tengan rentabilidad económica y conlleven acuerdos de competitividad con una reducción de los costes de inversión y fabricación. Además, "con efecto inmediato", se paralizan "todos los trabajos relacionados con el Proyecto P2JO --nuevo Opel Corsa-- y se inicia el estudio de un emplazamiento alternativo en otra plata de PSA.

"Se paraliza asimismo el proyecto de ampliación de capacidad en la nave de carrocerías, Opel España no optará a inversiones en nuevos modelos y se inicia el estudio para la integración en el medio plazo de las dos líneas de montaje en una sola línea en la nave de acabado final".

En el texto se afirma que desde la dirección de la empresa gestionarán "los impactos en volumen y pérdida de empleo" de la forma "más racional y eficiente posible". Además, asegura que se hablará con la representación de los trabajadores para incorporar "todos estos nuevos conceptos" en la negociación del convenio colectivo.