Ildefonso Sánchez Barcoj, número dos de Caja Madrid, autorizó el aumento del crédito de las tarjetas 'black' de los consejeros y directivos de la entidad porque a algunos se les quedaba pequeño, sobre todo en vacaciones. Entre ellos, Matías Amat, número tres de la caja, que pidió ampliar su límite hasta 60.000 euros, según ha informado El País.

Los correos internos de la caja demuestran que el crédito se disparaba en Semana Santa, Navidad y vacaciones de verano. El propio Miguel Blesa o el exjefe de la casa del Rey, Rafael Spottorno, pidieron también la ampliación de crédito de sus tarjetas opacas.

Ya en 2012, cuando el Gobierno intentaba salvar a Bankia de la quiebra, su entonces presidente, Rodrigo Rato, volvió a hacer uso de las tarjetas 'black' y dio luz verde para usar una nueva tarjeta opaca. Tenía un límite de 12.000 euros al mes y con ella pretendía compensar la pérdida de poder adquisitivo de los consejeros.

Sin embargo, unos meses más tarde, la entrada de José Ignacio Goirigolzarri en Bankia puso fin a estos gastos de manera radical. El director de operaciones pidió por correo que se cancelaran las tarjetas.

En total, nueve años de escándalo 'black', un entramado cuyo fraude a Hacienda supera los 15 millones de euros y por el cual Miguel Blesa, Rodrigo Rato y otros 64 cargos implicados que serán juzgados por la Audiencia Nacional. Los acusados declararán entre el 4 y 5 de octubre, una fecha que coincide con la primera parte del juicio del caso Gürtel.