Javier tiene claro cómo será la hipoteca del mañana, primero a tipo fijo, cada vez más eligen esta opción que supone hoy casi un tercio del total: "Es lógico que las hipotecas a tipo fijo supongan hoy una oportunidad y haya tanta atracción por ellas porque dentro de cinco años es probable que no las puedas conseguir o sean mucho más caras".

El precio también cambiará, los propios bancos reconocen que serán más caras tras los cambios normativos. "Cuantos más requisitos, el producto es más caro al final", explica Francisco González, presidente del BBVA.

La otra característica es que serán más transparentes: la reforma del Gobierno plantea que los compradores firmen un documento, ante notario, donde declaren que entienden toda la información.

Además, en la hipoteca que viene, bancos y clientes compartirán los gastos al firmarla después de que los tribunales hayan dado la razón a los consumidores. Cambios con los que la banca, dicen los expertos, pretende mejorar su reputación en la sociedad.