El Cacereño estrenó diseño en una camiseta de fútbol. Ocurrió en Tercera división, en su partido ante el Jerez, cuando el árbitro no permitió que saltase al terreno de juego con ninguna de los dos equipaciones que presentó. El motivo, que los colores no se iban a distinguir con los del Jerez.

Así, el Cacereño se vio obligado a recurrir a una solución inédita... ¡jugar el partido con los dorsales pintados a bolígrafo! El equipo extremeño saltó al campo con camisetas blancas y los números y nombres de sus jugadores escritos a mano.

Los medios locales no tardaron en hacerse eco, a lo que el propio club contestó con un tuit: "El árbitro no nos ha permitido jugar con ninguna de los dos equipaciones que le hemos presentado. Llevábamos las dos equipaciones oficiales".