No solo tiene el mejor coche, sino que también tiene la cabeza más fuerte. A pesar de todas las dificultades de la Q3, y a pesar de ver cómo siendo el más rápido a punto estuvo de quedarse sin la pole por unas u otras circunstancias, Lewis Hamilton saldrá desde la primera posición de la parrilla por delante de Bottas y de Raikkonen en el GP de Azerbaiyán. Sainz y Alonso se quedaron sin Q3, con Fernando cayendo en Q1.

Ni mejoras ni nada. Cómo debe ser el ritmo y la velocidad del motor Honda que Fernando Alonso, al final, ha dudado de si sus rivales se piensan que su vuelta lanzada es en sí una vuelta de regreso a boxes. En Bakú, en una pista con una enorme recta, la total ausencia de poder de la unidad de potencia japonesa se ha hecho incluso más evidente. Y, en esta F1, si la máquina no te permite ir rápido no se puede hacer nada.

Precisamente nada es lo que ha hecho McLaren-Honda en clasificación. Vandoorne ha sido último, sabiendo que Jolyon Palmer ni tan siquiera ha salido a pista. Y Alonso ha estado a 17 milésimas de colarse en Q2 de forma milagrosa viendo lo que lleva. La tortuga naranja parecía algo veloz en manos del asturiano, pero un error en la frenada le ha podido costar caer en Q1. Tampoco habría importado mucho, pues la sanción de apenas 40 puestos que tiene en la octava carrera le iban a hacer salir último.

Eso sí, al menos no han roto ni nada, y eso es un avance. No parece que así vayan a poder estar en la zona noble de la F1, zona en la que están Red Bull, Ferrari y, por supuesto, Mercedes. Los plateados, después de unos Libres algo ocultos, han mostrado su poder absoluto en clasificación y apenas han tenido rival. La diferencia entre Hamilton, primero, y Vettel, quinto, en la Q1 era de un segundo, pero es que Lewis ya tenía más de medio segundo con su máximo perseguidor en tiempos.

La alfombra plateada de Hamilton continuó en Q2, donde tan solo Bottas se le acercó minimamente. Con los neumáticos en temperatura, Lewis se mostraba intratable en cada ronda, y también parece que habría sido así en Q3 de no ser por la bandera roja de Daniel Ricciardo. En la relanzada, y a pesar de un mal primer sector, voló para lograr una nueva pole y superar así a Ayrton Senna.

No hubo españoles en Q3, pues Carlos Sainz cayó por unas tres décimas ante Ocon en la Q2. No pudo dar muchos giros en los Libres, y se notaba que el Toro Rosso no se encontraba en su salsa en Bakú. Al final, 12º, puesto que unido a la penalización de tres posiciónes hacen que el madrileño tome la salida de Azerbaiyán desde la 15ª plaza.