Fue en 1980: Gloria tenía 12 años y hasta los 15 estuvo sometida, pero tuvieron que pasar 32 años para reunir el valor suficiente y dar el paso de denunciar.

La denuncia fue respaldada por su excompañera Irene Martínez y el entrenador Toni Llorens; ambos confirmaron que presenciaron esos abusos.

Archivaron la causa

Pero la Audiencia Provincial de Madrid, además de archivar la causa por haber prescrito el delito, aceptó la denuncia de Carvallo por intromisión al honor y les impuso una multa de 10.000 euros a cada uno.

Recurrieron y ahora, cinco años después, el Tribunal Supremo les exime de la multa y además remarca lo siguiente: este tipo de sentencias impediría la denuncia pública, tan importante en estos casos.

Ahora esperan que esto les sirva a otras víctimas para denunciar, porque el silencio solo hace que el delito continúe.