"Loca y con altibajos", así describe Rubén Castro su relación con su expareja, a la que presuntamente agredió y por lo que está siendo juzgado. El jugador del Betis aseguró en su declaración ante el juez que "jamás" pegó a su expareja y relató cómo reaccionó ella cuando quiso romper su relación.

El principio de su conversación, según relató Rubén Castro, fue amigable, un encuentro sin crispación, pero la actitud de su exnovia cambió: "Quedamos para hablar de nosotros, cuando llego está ella aparcada, ella está delante, me bajo del coche, me acerco a su ventanilla y empezamos a hablar".

Siguió explicando ante el juez lo que ocurrió con su pareja, asegurando que ella le intentó atropellar: "Cuando le digo que quiero romper nuestra relación, ella se pone muy brava, muy furiosa, y me golpea con el brazo. Después, arrancó su coche con la intención de atropellarme. Ella me siguió con el coche y la perdí de vista".

Además, reconoce que "nunca le ha visto moratones" y que no recuerda que la golpease, asegurando que "no tiene explicación a lo que pasó".