La Audiencia Provincial de Bizkaia juzga, a partir de este miércoles, a nueve hinchas del Paris Saint Germain (PSG) por los graves desórdenes públicos que cometieron en Bilbao el 29 de septiembre de 2011, con motivo del partido de la UEFA Europa League que se celebró contra el Athletic Club en San Mamés, hechos por los que se enfrentan a penas que suman 33 y 53 años de cárcel.

En sus escritos, las acusaciones relatan que, horas antes del encuentro, alrededor de unos 50 ó 60 aficionados del equipo francés -entre los que se encontraban nueve de los acusados que actuaban siempre en grupo- se dirigieron a la zona de las calles Licenciado Poza y Doctor Areilza, en las cercanías del estadio, "con el ánimo de alterar el orden público", y comenzaron a golpear violentamente el mobiliario urbano y de los diversos establecimientos hoteleros.

Además, "arrojaron todo tipo de objetos contundentes" contra las fachadas y las personas que estaban en la calle, que, según los atestados de la Ertzaintza, "huían aterrorizados".

En los altercados causaron cinco heridos -uno de ellos muy grave-, entre ellos un ertzaina al que lanzaron una silla a la cabeza. Otro agente fue empujado violentamente en repetidas ocasiones, pero no sufrió lesiones.

El Fiscal acusa a los procesados de delitos de desórdenes públicos, lesiones, daños y sendos atentados, y solicita para L.R. penas que suman ocho años de prisión; tres años para otros ocho y un año y medio para otro por enfrentarse a un ertzaina dentro de San Mamés.

Por su parte, la acusación particular reclama 16 años de cárcel para uno de ellos, 13 para otro de los detenidos, y una indemnización de 100.000 euros, mientras que para el resto pide las mismas penas que el ministerio público.

Tanto el ministerio público como la acusación particular recuerdan que los hechos sucedieron a las 18.00 horas, cuando los hinchas del equipo parisino llegaron a las inmediaciones del bar 'Mugi' de la calle Licenciado Poza, entre ellos los acusados, y comenzaron a arrojar sillas y mesas de la terraza contra los clientes.

En los incidentes resultó herido un aficionado que precisó de puntos de sutura, y otro sufrió traumatismo craneoencefálico y otras heridas, por lo que necesitó tratamiento quirúrgico, puntos y rehabilitación durante 153 días.

Los dos lesionados se refugiaron en el interior del 'Mugi', que había cerrado la puerta para impedir la entrada de los ultras franceses.

Entonces, los radicales del PSG empezaron a lanzar contra la fachada mesas, sillas y el resto de mobiliario que se encontraba en el exterior. Los daños ascendieron a casi 3.000 euros.

Los aficionados del PSG siguieron empujando violentamente la puerta del establecimiento hostelero para acceder a su interior, a pesar de que sabían que en el otro lado había personas que empujaban en sentido contrario para que no lograran entrar.

De esta forma, la puerta golpeó en varias ocasiones a R.O. y le causó diversas lesiones.

Inmediatamente después, se produjeron enfrentamientos entre los aficionados del Paris Saint Germain y del Athletic Club en la calle Doctor Areilza, en los que, según el relato de la acusación, participaron activamente L.R. y P.L., junto a un numeroso grupo de franceses.

Estos se dirigieron hacia donde se encontraba un seguidor del PSG de 34 años, que intentaba huir del lugar y se había quedado rezagado de sus amigos.

Entonces lanzó una silla que alcanzó al joven, mientras otro, en una acción conjunta, le asestó un rodillazo en la cara, que le proyectó violentamente de espaldas, golpeándose la cabeza contra el suelo.

El herido sufrió traumatismo craneoencefálico con hemorragia cerebral y fractura de mandíbula, entre otras lesiones de carácter muy grave.

Este precisó de tratamiento quirúrgico, médico y rehabilitador por los daños físicos y psíquicos que padeció, estando impedido durante 209 días, de los que doce estuvo en el hospital.

Le quedaron como secuelas síndrome postconmocional y anosmia (pérdida del olfato).

También en Doctor Areilza, en ese mismo momento, un ertzaina uniformado del dispositivo de seguridad observó que un radical lanzaba mobiliario y alteraba el orden público, y le gritó que se detuviera.

El acusado respondió arrojando al agente una silla en la cabeza, que le produjo una herida en la ceja derecha, en la que tuvieron que darle puntos.

Ya una vez pasadas las 21.30 horas, en el interior del estadio del antiguo San Mamés, durante la celebración del partido, un seguidor empujó violentamente y en repetidas ocasiones a un ertzaina uniformado, cuando éste le recriminó que dirigiera gestos provocativos hacia la hinchada bilbaína. El agente no sufrió lesiones.

Las acusaciones reclaman a los procesados el pago de diversas indemnizaciones a los heridos y multas por los daños ocasionados, en concreto a los propietarios del bar 'Mugi'.

En el caso del herido más grave, el fiscal solicita el abono de 41.000 euros, mientras que la representación legal de la víctima exige 100.000 euros.

La vista oral está prevista que se celebra durante los días 28, 29 y 30 del próximo mes de junio.