Chile sufrió mucho ante Australia en su peor partido en la Copa Confederaciones y firmó un empate (1-1) que la condena a enfrentarse a la Portugal de Cristiano Ronaldo en las semifinales. Como Alemania no falló ante Camerún (3-1), el equipo dirigido por Juan Antonio Pizzi quedó en segundo lugar en el Grupo B y no se citará con México, como apuntaban todos los pronósticos. La Roja no se encontró cómoda en ningún momento y fueron los australianos quienes dictaron sus condiciones desde el pitido inicial.

Los australianos plantearon una defensa muy adelantada y presionaron la salida del balón de la Roja, que tuvo al principio muchas dificultades para salir desde atrás. Con todo, tras una jugada en la que pareció que Jara empujó a Juric dentro del área, Arturo Vidal tuvo la primera ocasión al rematar de volea un centro desde la derecha que fue despejado por Ryan y el rechace fue desaprovechado incomprensiblemente por Vargas.

Los oceánicos sorprendieron a los chilenos con su agresividad en toda la cancha, aunque también es verdad que el árbitro estuvo un poco permisivo, especialmente con el marcaje a Vidal, que recibió faltas de todos los colores. A la media hora entró en acción el VAR después de que Alexis Sánchez recibiera un balón largo de Jara y cuando se disponía a batir a Ryan, se le adelantó un defensa, que le arrebató el balón, pero también lo derribó.

Australia logra el primero

A falta de diez minutos para el descanso, Bravo tuvo la oportunidad de demostrar que estaba plenamente recuperado y salvó a su equipo al despejar en su salida un disparo de Luongo tras un magnífico pase de Troisi. Chile estaba avisada, pero no tomó nota y después de que Aránguiz perdiera la pelota tras un pase muy arriesgado de Bravo, los australianos castigaron la dejadez de los pupilos de Pizzi.

Tras una gran jugada colectiva el balón le llegó en el segundo palo a Troisi, el mejor jugador de la primer parte, que lo picó por encima de Bravo en su desesperada salida (min.42). Chile lo intentó a la desesperada en la recta final del primer tiempo y Arturo Vidal remató en plancha tras la mejor jugada de su equipo, pero el balón fue despejado por un defensa.

Alexis cede el empate a Martín Rodríguez

Pizzi no se anduvo por las ramas y en el descanso introdujo en el campo a Martín Rodríguez para poner en apuros a la defensa australiana, junto al jugador del Celta de Vigo Pablo Hernández. La tónica del partido no cambió, ya que los chilenos no controlaron el juego en ningún momento y los australianos siguieron mirando a la portería rival.

Hubo momentos en los que el equipo latinoamericano se vio superado y pareció que los australianos podían dar la sorpresa y clasificarse para las semifinales, para lo que necesitaban ganar por dos goles de diferencia. Pero el dios del fútbol no sonrió a los australianos y cuando peor lo estaba pasando Chile, marcó Martín Rodríguez tras recibir un pase de cabeza de Alexis, que se elevó por encima de los gigantescos centrales rivales (min.67).

Seguidamente, Vargas pudo marcar el gol de la victoria tras una jugada en la que Alexis se fue de su marcador por una banda, pero su cabezazo salió lamiendo un poste. También McLaren pudo marcar, pero su remate de cabeza casi a bocajarro salió fuera por poco.