Es difícil hablar de ello y encontrar las palabras. Se ve muchas veces por TV, muy lejos, incluso he visto lo que pasó en Nochevieja en mi país. Me sentía cerca pero aún así es muy lejos comparado con lo de ayer. No deseo a nadie que sufra algo así.

La gente tal vez no pueda entenderlo, pero hasta que no estuve en el campo en la segunda parte no pensaba en el fútbol para ser sincero. Anoche no era consciente de lo que pasaba cuando llegué a casa y vi a mi mujer y mi hijo esperándome en la puerta me sentí afortunado. Sé que el fútbol es importante, amamos el fútbol, sufrimos por el fútbol, ganamos mucho dinero, tenemos una vida privilegiada… pero somos seres humanos.

Hay mucho más que fútbol en este mundo y anoche lo comprobamos. Se me ponen los pelos de punta cuando pienso en lo que viví en el bus anoche. No puedo olvidar las caras, jamás olvidaré esas caras, seguro. Cuando vi a Marc (Bartra) junto a Schmelzer… Nunca olvidaré la cara de Schmelzer. Fue increíble.