Hablar de dopaje en el ciclismo es hablar de Lance Armstrong. El estadounidense, que en su día ganó siete Tours de Francia, admitió en su día haberse dopado pero, en una charla en la que también participaron otros dos ex US Postal como Hincapie y Vande Velde afirmó que si ganó todo lo que ganó fue porque trabajó "muy duro". "Me dopé, pero no quiero que los aficionados me recuerden por eso. Trabajé mucho y muy duro para ganar todo lo que gané", admitió.

Y es que Lance Armstrong comenta que "no todo es blanco o negro". "No hay que olvidarse del esfuerzo de todos los corredores, incluso si se están dopando al mismo tiempo. Teníamos la mejor tecnología, entrenábamos como nadie, el mejor director, el túnel de viento, una dieta exhaustiva... Eso no puede quedar en nada", afirma.

Armstrong no quiere que todo lo que ha logrado quedé en nada por su caso de dopaje: "Mis errores ya han sido castigados. Una leyenda que pasó de estar en lo más alto a caer a lo más bajo de la noche a la mañana".