Las cámaras se fijan por ejemplo en una joven que se levanta la camiseta, pero nadie la toca por lo que no hay delito. Otra joven hace lo mismo y de nuevo los jóvenes de alrededor mantienen la distancia.

Nuestras cámaras captan cómo a otra chica le intentan subir la camiseta y le tocan el culo. Ella se encara con el joven. Le recrimina su actuación hasta que finalmente termina desistiendo y baja.

Ante cualquier agresión, varios agentes de paisano están preparados para actuar.

Ya están intentando localizar a otro joven que saca una bengala en mitad del chupinazo poniendo en peligro la seguridad.

Este ha sido un chupinazo con un despliegue de seguridad sin precedentes. Bolardos taponando las calles, furgones atravesados y 400 policías desplegados.

El control de acceso a la plaza este año ha sido mucho más exhaustivo, revisando cada mochila y cada bolsa.

Unas medidas que hasta el momento están funcionado, con un chupinazo que ha terminado sin graves incidentes.