El diseñador David Delfín fue intervenido en abril de 2016 de tres tumores cerebrales "de grado tres" en una complicada intervención en la que tuvo que estar despierto para hacer más fácil el trabajo de los médicos.

Ahora, el diseñador, que recientemente ha perdido a su gran amiga y musa Bimba Bosé, también víctima del cáncer, ha sufrido una recaída según ha relatado su madre en una entrevista: "Mi hijo está muy mal. Se le ha paralizado ya media parte de su cuerpo. Hay que darle de comer, porque la mano no le responde y estamos todos muy afectados".

"Hace dos años, en fin de año, que vino a pasarlo con nosotros, empezaron todas sus dolencias. Él siempre ha sido un chico muy sano. El fin de año de 2016, estando aquí en casa, fue a ducharse y empezó con unos dolores muy fuertes en la pierna derecha. Él no sabía lo que era y nada más llegar a Madrid fue al médico y le informaron que padecía tres tumores en el cerebro", explica María González.

Tras recaer en la enfermedad y ver mermado su estado de salud, Delfín ha sufrido una perdida considerable en el habla y la memoria. "Él no quiere que le vea así. No le gusta que esté allí y sufre por mí", relata su madre.

María González también ha hablado sobre cómo le afectó al diseñador la pérdida de su gran amiga y musa Bimba Bosé, víctima de la misma enfermedad. "Removió mucho a mi hijo", asegura.