Una casualidad ha permitido descubrir el asentamiento prehistórico más antiguo de Australia. Todo comenzó cuando Adnyamathanha Clifford Coulthard visitaba las gargantas del norte de Flinders Ranges y sintió "la llamada de la naturaleza".

Al buscar un sitio donde orinar entre unas rocas, descubrió un refugio de piedra con un techo ennegrecido unos 20 metros por encima del lecho del arroyo.

Inmediatamente lo relacionó con las costumbres de los hombres prehistóricos y así se lo confirmó Giles Hamm, un arqueólogo que estaba realizando esta ruta con él, según informa 'ABC News'.

A partir de entonces, comenzó una campaña de excavación que permitió encontrar restos con una antigüedad de 49.000 años, 10.000 más que los que se tenían hasta ahora.