Un nuevo informe del Foro Mundial revela que los seres humanos están poniendo en peligro la vida silvestre del planeta. El estudio revela un precipitado declive en las especies animales intentando sobrevivir y luchar contra su mayor enemigo: el ser humano. Según la versión de este año de la Bienal del WWF Informe Planeta Vivo se ha encontrado una disminución del 58% en general en las poblaciones de vertebrados entre 1970-2012. La organización no lucrativa advirtió que si las tendencias actuales continúan, el mundo podría perder más de dos tercios de la vida silvestre en 2020.

Los seres humanos han perjudicado a todo el espectro de la vida de los vertebrados: peces, aves, mamíferos, reptiles y anfibios, tal y como expone el informe. La advertencia del documento de la desaparición de la fauna se refiere al tamaño de la población total, no al número de especies que se extinguirán. Eso es un problema totalmente diferente. "A medida que la humanidad explota cada vez más la tierra, se va deshilachando más la vida silvestre", dijo Colby Loucks, director del Programa de Conservación de Vida Silvestre de la WWF.

Animales muertos

Loucks vinculó pérdidas de vida silvestre a lo que llamó el "cinco jinetes de la apocalipsis del medio ambiente": la pérdida de hábitat, la sobreexplotación, la contaminación, las especies invasoras y el cambio climático. Esos factores han socavado las 3.706 especies documentadas por el WWF en la tierra y en el mar y de agua dulce hábitats.

El documento también informa que las especies de agua han sido las más afectadas llegando el bioma de agua dulce a cubrir menos de un 0.01 de la superficie del planeta, y los estudios sobre las poblaciones animales no han revelado buenas noticias: hay una gran disminución de elefantes africanos cayendo más de un 30% en tan sólo siete años, y en amplias zonas de Australia la gran barrera de coral se ha convertido en un cementerio de la misma.

El problema al que nos enfrentamos son las prácticas humanas como la tala de selvas tropicales, la caza furtiva o la sobrepesca de los mares. A pesar de todo ello el informe muestra que todavía queda alguna esperanza, aún hay tiempo para detener la extinción en masa: "Los hechos y las cifras de este informe tienden a pintar un cuadro difícil, pero todavía hay mucho margen para el optimismo. Si somos capaces de llevar a cabo los cambios, los beneficios serán enormes.La sostenibilidad y la resiliencia se lograrán mucho más rápido si la mayoría de la población de la Tierra a comprender el valor y las necesidades de nuestra tierra cada vez más frágil", dice el informe", concluye el informe.