La compañía privada de viajes espaciales SpaceX, propiedad de Elon Musk, ha lanzado con éxito y por primera vez un cohete y una nave espacial recicladas para enviar suministros a la Estación Espacial Internacional (EEI).

Después de una serie de demoras, la misión de Servicios de Reabastecimiento Comercial 13 (CRS-13) despegó hacia la EEI desde la plataforma de lanzamiento de Cabo Cañaveral en Florida (EEUU).

La cápsula Dragon, probada en vuelo y asentada sobre un cohete Falcon 9 reutilizado, remolca algo menos de 2.200 kilos de carga y material a la EEI, incluida cebada para los experimentos de fabricación de cerveza de la compañía Budweiser.

La agencia espacial estadounidense (NASA) aprobó su uso después de realizar una extensa revisión de los riesgos. "Estamos muy confiados con que el riesgo en este vehículo no sea significativamente mayor que en un nuevo refuerzo", dijo Kirk Shireman, gerente del programa de la EEI de la NASA, respecto a la utilización de elementos ya usados. "Creemos que es un riesgo equivalente", agregó antes del lanzamiento.

Con un clima casi perfecto, las impresionantes imágenes del lanzamiento muestran el momento en que la primera y la segunda etapa del aparato se separaron con éxito, enviando a Dragon a su camino hacia la EEI, y la primera etapa de regreso a la Tierra.

Una vez más, la primera etapa del Falcon 9 de SpaceX logró aterrizar de regreso a la plataforma de lanzamiento, tocando tierra suavemente, pero para la cápsula Dragon, el viaje aún no termina.