Preguntar cuál es la estación más cercana es un gesto del día a día de Daniel, es ciego y siempre ha necesitado ayuda de otros para poder orientarse. "El hecho de que tengamos que recurrir de manera habitual a una tercera persona para que nos ayude a hacer según qué cosas es algo incómodo y desagradable", explica Daniel Montalvo, persona con discapacidad.

Ahora la situación de Daniel puede cambiar. Un proyecto impulsado por 'Ilunion', el grupo de empresas sociales de la ONCE y su fundación, quiere situar balizas en diferentes puntos de interés para que las personas con discapacidad visual puedan identificar lo que tienen a su alrededor.

"Le haces pitar y te orientas para saber dónde está el cuarto de baño, un ascensor, el mostrador o la habitación de un hotel, son elementos que pueden ayudar muchísimo a mejorar la independencia y la autonomía personal", señala Jesús Hernández, director de accesibilidad Fundación ONCE.

Las balizas de guiado, llamadas beepcons, están vinculadas por bluetooth al teléfono móvil que les avisa con un pitido cuando se aproximan a ellas. Son capaces incluso de leer el menú de un restaurante O de dar información sobre monumentos y estaciones de transporte.

Cualquier establecimiento puede dotarse de este sistema, solo tiene que comprar la baliza y programarla con la información que quiera darle al usuario. "Con la tecnología lo que conseguimos es hacer grandes avances con un costo muy reducido", cuenta Roberto Torena, gerente de Ilunion. Una pequeña inversión que podría facilitar la vida de más de 70.000 ciegos en España.