La misión de este robot es convertirse en una personalidad empática y utilizar su tecnología para ayudar a los seres humanos a vivir mejor.

Sin embargo, conforme las imágenes del robot comenzaron a circular por las redes, muchos han criticado que el robot tenga más derechos que las propias mujeres saudíes al no tener que cubrirse, llevar velo o no tener "un guardián".

También se le compara con los trabajadores inmigrantes que llevan toda su vida en el país y no han obtenido la nacionalidad.