Un grupo de investigadores gallegos ha descubierto el que puede ser el método más eficaz para abandonar la obesidad sin, necesariamente, pasar hambre. La clave de todo esto puede ser una proteína que se añade en el cerebro y que es capaz de convertir la grasa blanca en grasa parda.

El experimento se ha llevado a cabo en ratas que sufrían obesidad y, tras introducirles una proteína conocida como BIP, los animales bajan de peso sin necesidad de dejar de comer. Además, las ratas empleadas en este estudio mejoran su metabolismo y reducen su diabetes.

Este descubrimiento abre una vía de esperanza para aquellos que necesitan bajar de peso pero no tienen la suficiente fuerza de voluntad para reprimir sus instintos alimenticios. Aún así, el descubrimiento es un primer paso y, como apuntan los investigadores, queda todavía mucho trabajo por delante.