El estudio halló que entre el 90 al 99% de estos arrecifes han desaparecido, según un comunicado de la Universidad James Cook (JCU).

"Ya sabíamos que los arrecifes de crustáceos estaban en mala forma en todo el mundo porque un 85% de ellos han desaparecido o están severamente degradados", dijo el director de asuntos marinos de Nature Conservacy Australia, Chris Gillies.

Los arrecifes de crustáceos se forman por el aglutinamiento de bivalvos como ostras y mejillones, que crean, modifican y mantienen un hábitat que sustenta varias especies de peces e invertebrados, y protege la línea costera.

La mayoría de estos ecosistemas desapareció entre los siglos XIX y XX debido a las prácticas pesqueras destructivas, el deterioro de la calidad del agua, las especies invasoras, el brote de enfermedades y los cambios ambientales.

El coautor del estudio, Ian McLeod, de la UJC, destacó que estos arrecifes están más amenazados que la Gran Barrera, el sistema coralino más grande del mundo situado en el noreste de Australia.