Los delitos de odio por orientación o identidad sexual alcanzan los 230 casos en España. Los delitos contra el colectivo LGTBI suben un 36%, una razón más para exigir que se apruebe una ley de igualdad cuanto antes.

"Es absolutamente imprescindible que esta ley de igualdad LGTBI se tramite a la mayor brevedad posible. Solucionaría el problema de las parejas de mujeres para inscribir a sus hijos, solucionaría el problema de las personas intersexuales que todavía son sometidas a intervenciones quirúrgicas sin su consentimiento", explica Jesús Generelo, presidente FELGTB.

Actualmente, las parejas de mujeres no casadas no pueden escribir conjuntamente a su bebé. La no gestante debe iniciar un proceso de adopción, por eso Grego y Cruz, una pareja de lesbianas, tuvieron que casarse. "Nos casamos porque no nos quedó más remedio, para que yo legalmente pudiera ser la madre de mi hija", dice Cruz Pechi.

La proposición de ley aborda las necesidades de las personas trans, obligadas a una valoración psiquiátrica para desarrollarse con su género sentido. "Se vive como una humillación, como una discriminación porque es que realmente lo es. Realmente a nadie se le tiene que dar permiso para ser hombre o para ser mujer", asegura Leo Mulio, Psicólogo especialista en personas trans.

El texto recoge un protocolo para casos de acoso escolar y sanciones para quien discrimine, humille o agreda a una persona por su orientación e identidad. A Christofer Benítez le echaron de un centro comercial por besar a su pareja. Denunció el caso pero se archivó: "Si España tuviera una ley que de verdad nos protegiera de estas cosas, viviríamos muchísimo más tranquilos". Se trata dicen de debatir en el Parlamento lo que es de justicia.