Siempre se espera que la lotería ayude a los que más lo necesitan. Este año, además de los despedidos en Fagor, hay seis millones de parados que esperaban que su suerte cambiara. En la retina de todos se encuentra la imagen del año pasado cuando los empleados de una fábrica en suspensión de pagos de Alcalá de Henares celebraron la lotería.